Argumentos falsos del Plan Andinia

Un argumento falso que suelen utilizar muchos con el objeto de justificar el Plan Andinia es la visita de israelíes en la patagonia. Resulta increíble sostener esta idea con semejante destino turístico.

Para quienes no saben, teniendo en cuenta la problemática que Israel vive por el conflicto en Medio Oriente, el servicio militar lamentablemente es obligatorio. Para las mujeres es de un año y para los hombres tres. Al finalizar ese periodo, es muy frecuente que los jóvenes viajen, no podríamos esperar otra cosa. Los jóvenes emprenden distintas rutas: la mayoría viaja a India, en búsqueda de otras culturas y experiencia; muchos van al sudeste asiático y algunos optan por Sudamérica. Así como muchos europeos deciden viajar por seis meses por nuestro continente, algunos israelíes también vienen a nuestra región. Teniendo en cuenta la fuerte inmigración que hubo en Israel de argentinos y el fuerte impacto de los programas televisivos argentinos allá (todos los de Cris Morena – Rebelde Way por ejemplo), muchos sienten curiosidad por conocer estas tierras. Sin lugar a dudas encuentran paisajes que no existen en medio oriente que los atraen. Frente a la postal del desierto que allí viven, con poca montaña, se sienten atraídos por la vegetación, la selva, los lagos, las montañas, la nieve, la extensión de la tierra, las cataratas, los glaciares, la fauna animal e incluso, el clima. Cualquiera que viaje un poco sabe que Sudamérica y especialmente Argentina, tiene hermosos lugares para visitar. Obviamente la patagonia es el lugar que cualquier turista que viene a argentina desea conocer, sobre todo después tres arduos años de servicio militar.

Patagonia

Alertados los comerciantes todo esto, obviamente preparan carteles y menus para hacerlos sentir cómodos y ganar dinero. Un turista que se va satisfecho de un lugar puede recomendar a otro a que venga. De allí suponer que vienen a hacer reconocimientos del territorio, suena más a un cuento de ciencia ficción que algo real. Teniendo los problemas que tienen allá, resulta una locura pensar que de verdad están mandando gente acá. Cualquiera que haya viajado por el país, sobre todo en esto años, sabe que los carteles, menus y todo lo que rodea al mundo turístico está en varios idiomas. El Ingles predomina por demás.

Lo otro que es importante notar es que prácticamente no hay colectividad judía en el sur de Argentina y Chile. Sus comunidades residen principalmente en sus capitales: Buenos Aires y Santiago de Chile. Por consiguiente no tendrían apoyo en esa región para desarrollar el plan y tener los instrumentos como algunos suponen.

Comparto con ustedes una página chilena de un señor que vive en la patagonia que demuestra lo que venimos sosteniendo de este mito:

http://www.patagoniasinrepresas.cl/final/el-plan-andinia.php